El peculiar grupo formado por Manny, Ellie , la hija adolescente de ambos, Sid, y Diego con dos peculiares zarigüeyas tienes una vida relativamente feliz hasta que Scrat siguiendo a su adoraba bellota acaba en el interior de la Tierra con la desgracia de que la ardilla termina rompiendo en pedazos la tierra firme. Ahora por un lado está Ellie con su hija, y por el otro Manny, Sid y Diego, además de la abuela sorda de Sid, los cuatro flotando en un iceberg. Deberán luchar contra monstruos marinos y contra un mono pirata de lo más peligroso.
Allá por el año 2002 se estrenaba una de las películas animadas más entrañables y bien pensadas de la última década. Hablamos de La edad de hielo. En esta película asistíamos al fortuito encuentro de un grupo de animales solteros que se embarcaban en una trepidante aventura. Luego uno de ellos encontró en amor, tuvieron que luchar contra una terrible inundación por culpa del deshielo, aprendieron a nadar, lucharon contra los dinosaurios y pasaron mil y una aventuras para ser felices. Sin saberlo nuestros tres amigos pasaron grandes aventuras por culpa de una ardilla prehistórica empeñada en conseguir la bellota de sus sueños.
En esta cuarta entrega, agotado el recurso del deshielo y el de los dinosaurios, nuestros se enfrentan a la división del continente en pequeños trozos que hace que Manny se vea separado de su familia y se quede con sus dos amigos, y con la abuela de Sid, en un bloque de hielo perdido en el mar. Y cómo siempre el culpable es Scrat que reparte el mundo en pedazos según gire el interior de la Tierra. El rigor científico nunca ha sido el fuerte de estas películas, pero nos da igual.
Está dirigida por Steve Martino (Robots, Horton) y Mike Thurmeier (La Edad de hielo, Horton, La edad de hielo 3), un director nuevo y otro que ya es veterano en la saga. Es por eso por lo que nos encontramos con cosas ya vistas en anteriores entregas y que definen el estilo propio que caracteriza esta serie, y con elementos innovadores. Pero aún así no es suficiente para que la película tenga una buena nota. Es cierto que tiene un poco más de vitalidad que la tercera pero eso no la convierte en mejor.
Siendo sinceros, y basándonos en lo que nos encontramos a partir de la segunda entrega de esta franquicia animada, no contamos con un guión bien esbozado, porque el argumento y su desarrollo tiene que estar al servicio de las travesuras de Sid, de las locuras de Scrat o de las gracias de otros peculiares animales, véase las zarigüeyas u otros personajes. El caso es que al final asistimos a una cinta que es una sucesión de escenas graciosas engarzadas bajo una historia que si la miramos con atención hace agua por todos lados.
Por eso si vas a ver alguna película de la saga de la edad de hielo, exceptuando siempre la primera entrega cinta que sí posee una buena historia con una unión perfecta de ternura y diversión, lo que tendrás es una cinta destinada a hacer disfrutar a los más pequeños con animales muy divertidos y muy bien hecha técnicamente. No puedes esperar nada más porque no hay nada más.
La cuarta entrega no es por eso una sorpresa porque estaba claro que estamos ante una película claramente familiar que busca arrancar las risas de los más pequeños, dejando de lado a los adultos pues no hay ningún toque que permita que se impliquen en la historia. Por eso aquí nos vamos a encontrar con un cierto abuso de personajes nuevos (un erizo, manuts adolescentes, monos, conejos, chicas dientes de sable…) en detrimento de crear un historia mejor elaborada y algo más compleja. Es como si tuviéramos que vender una casa vieja y en vez de reforzar las paredes y las vigas o quitar las manchas de humedad simplemente lo limpiásemos muy bien y colocáramos cuadros para esconder las griegas de la pared. El resultado a simple vista es perfecto pero si indagamos un poco nos damos cuenta de que la estructura no es muy estable. Eso se traduce en que tenemos una película con un historia un tanto plano y sin grandes giros argumentales que satisfagan plenamente a los que acompañan a los pequeños.
En esta cuarta y última entrega, se nota un poco el agotamiento de los personajes y se abusa en exceso de las escenas divertidas pero aún así vale la perna verla. Si hicieran una quinta entrega iría a verla. ¿Por qué? pues porque disfruto mucho con estos personajes y porque comprendo la naturaleza liviana de cada cinta, eso me permite olvidarme de sus fallos argumentativos y divertirme con las locuras de sus personajes.
Aunque claramente está por debajo de la primera entrega (eso también le ocurre a otras cintas algunas de las cuales son estrenos novedosos) La edad de hielo 4 está destinada a ser disfrutada por familia mientras se comen palomitas o lo que se tercie.
O puedo dejar esta crítica sin mencionar otra saga de animación que o ha tenido tanta fortuna. La trayectoria de la Edad de Hielo me recuerda un poco a Sherk pero sólo en la cuestión numérica porque de las cuatro películas de este ogro verde la única que vale la pena ver es la primera. El resto mejor olvidarse. La última, Sherk 4 no sé para qué la hicieron. En cambio la franquicia de la Edad de hielo continúa después de diez años con todo su entusiasmo, es cierto que las sucesivas cintas carecen de la magia de la primera pero son muy agradables de ver.
Clasificación: 6/10
Esta la ví con la pequeñaja. Y tienes razón. Ha perdido mucho con respecto a la primera, pero las carcajadas están aseguradas. Nos lo pasamos genial viéndola.
Besotes!!!
Disfruto con estas películas como una enana. Esta no me la perderá…
Besos,
La cuarta entrega es la única que me queda por ver y, aunque pierda un poco de interés, supongo que acabaré viéndola en algún momento, porque las anteriores me parecieron estupendas. Besos