Quizá esta sea una opinión muy impopular pero poco importa ahora mismo. Las últimas películas de Disney, con grandes estrenos y protagonistas únicos han sido Raya el el último dragón, Moana, Zootopia (el sueño de la coneja en ser policía), Frozen, Enredados, … Creo que vas cogiendo la idea. Todas tienen a mujeres como protagonistas absoulto. Big Hero 6, o Rompe Ralph rompen un poco esta tradición pero lo que une a ambas es que que no se pueden considerar grandes películas de animación, sí, son divertidas y entretenidas pero no de una magnífica calidad narrativa. En cualquier caso Disney se ha especializado en crear heroínas que no necesitan a nadie para resolver los problemas. Las dulces princesas de los años cuarenta y sesenta se habían transformado en las protagonistas de cualquier novela juvenil que puebla las estanterías de las librerías. Parece que querer ser princesa, o querer tener un pretendiente, o simplemente enamorarse, es algo que no se puede ni mentar. El amor romántico parece que se ha convertido en tabú en las películas de Disney/Pixar.
Y hablando de Pixar esta no resuelve el problema anterior, Soul, es demasiado adulta, Toy Story 4 es una copia de las anteriores, Los increíbles 2 no pasa de mediocre, Buscando a Dory puede ser una pesadilla si te pilla en mal momento -mi hermana terminó odiando a Dory y su constante pérdida de memoria-, Inside Out es muy interesante pero poco más, Monster University no es gran cosa, y así podríamos a seguir. Todas son películas corales en las que no hay un protagonista único. Solo romper esta regla, Brave -otra adolescente con aire de héroe- y Coco, la única que verdaderamente vale la pena. Se podría decir que solo dos películas tiene un niño como protagonista, Big Hero 6, y Coco. Lo siento pero El buen dinosauro no entra aquí, el dinosauro es el protagonista y el niño es la mascota.
Todo esto nos lleva a una conclusión: Disney ha hecho otra película para niñas al que ha añadido un mensaje de diversidad y idea de que todos podemos ser buenos si confiamos los unos en los otros. ¡Uffff, otra película de Disney con chica guerrera y cargada de buenas intenciones! Esto es lo que es Rayna y el último dragón, y con esto no quiero decir que sea buena o mala, sino que esa es la esencia de la película, lo que la convierte en nada original en su concepción. Lo único remarcable es el ambiente en la que está ubicada: un reino con aires muy del este asiático, y una animación muy rica y elaborada.
La historia es la siguiente. En un reino donde vivían los dragones y los humanos, se extendió una plaga que convertía a ambos en estatuas – me recuerda al Doctor Stone- pero el sacrificio de los últimos dragones hizo que la plaga fuera destruida, aunque supuso el fin para estas criaturas mágicas, cuyo poder ahora reside en uan piedra que el pueblo de Raya guarda con celo. Pues nuestra joven protagonista decide creer una joven de un reino vecino, le enseña la piedra mágica, todos pelean por conseguirla, se rompe, aparece la plaga…La misión de Rayna es unir las piezas de la piedra y destruir la plaga para poder recuperar a su padre, caído bajo la maldición de la piedra. Por el camino se le une, un niño dueño de un barco y además cocinero, una bebé que trabaja como ladrona con tres monos -no, no me lo estoy inventando-, un guerrero del norte, y Sisu, un dragón que se transforma en una humana y que es muy dulce y confiando. Les persigue en su viaje, la niña que traición a Raya hace años. Cada uno de estos personajes forma parte de un reino que antiguamente era uno uno. Pues como en un videojuego Rayna va de reino en reino consiguiendo las piedras, y también aliados, hasta llegar al último reino en donde se enfrentará a su pasado.
Si andas un poco por la red de redes verás que las críticas de esta película son estupendas, así que después de verla me siendo como un bicho raro porque no he visto la grandeza que le otorga una valoración tan alta. La historia me ha parecido simplista, por ejemplo, Raya no hace gran cosa para ganar los trozos de la piedra mágica así que no no hay grandes escenas de acción, y las que hay se guarda para momento muy concretos, lo que domina son los sentimientos y dudas de la protagonista, que se niega a confiar en nadie. Simplemente hay demasiado sentimentalismo y buenas intenciones por doquier. Además hay muchos momentos vacíos que se rellenan con escenas muy hermosa, como la del vuelo de Susu, pero que no aportan nada más que dar colorido a la película.
Raya en el último dragón es una película que se disfruta viendo, no lo voy a negar, pero una vez que surgieron los créditos no tuve la sensación de querer verla de nuevo. Pertenece esa categoría de una vez vista es más que suficiente. Con Kubo y las dos cuerdas mágicas, no me pasó lo mismo, la he visto varias veces y me sigue emocionando. Al igual que con Coco, o Enredados.
En cualquier caso no me extraña mucho que esta película sea así, cubrir las cuotas de las buenas maneras tiene que tener sus consecuencias, pero por suerte me queda el cine de animación asiático que siempre tiene propuestas más que decentes.

Raya en el último dragón
Dirigida: Carlos López Estada, Don Hall
Fantasía. Disney
Duración. 1 hora y 47 minutos. Fecha de estreno: 5 marzo 2021
Pues sí, esta es la sensación últimamente con estas pelis infantiles. Que con una vez que la veas ya tienes suficiente. No van a ser clásicos del género. No la he visto y no sé si me animaré.
Besotes!!!