Solos, Adam Baker

Una plataforma petrolera medio abandonada y en ruinas, atracada en un remoto lugar del océano Ártico, está a punto de ser cerrada. Una tripulación reducida aguarda la nave que los llevará a casa. Pero el mundo más allá de este gélido páramo ya no es el que recuerdan. Un siniestro virus se propaga por el planeta a toda velocidad. En cuestión de días, se ven asoladas ciudades enteras. Los contagiados, irreconocibles, se convierten en una horda rabiosa y casi indestructible. Uno por uno los canales de televisión y radio que unen la tripulación a lo que queda de la civilización humana dejan de retransmitir. El silencio invade las ondas. La incomunicación es total. Y el largo invierno en el Ártico solo acaba de empezar.  Atrapados en los confines de la tierra, quince hombres y mujeres se enfrentan al panorama desolador del hambre y la hipotermia, inconscientes aún de que la plaga apocalíptica que ha devastado al resto del planeta viene directo hacia ellos.

El género de zombis es desde hace unos años  uno de los géneros literarios de ciencia ficción más interesantes por las grandes posibilidades que tiene la historia a la hora de desarrollarse. Solos de Adam Baker pertenece a este género y sin llegar a ser un libro grandioso si tiene un toque de sorpresa que lo hacen inquietantemente atractivo de leer.

La historia comienza con una mujer, la reverenda Jane Blanc, una mujer obesa que aceptó un puesto en una lejana y helada plataforma petrolífera cercana al Polo Norte con la intención de bajar de peso. Puede ser una razón un tanto estúpida y banal pero los que están en Kasker Rampart han huido de algo, sino no tendría sentido estar meses y meses un un cubículo de hierro rodeado de un frío intenso y en medio de una noche perpetua.

La plataforma ya no es lo que era antes, una pequeña ciudad que se sustentaba en pivotes, ahora el personal es reducido y la sociabilidad brilla por su ausencia.  En medio de este clima, cuando ya estamos ante los seis meses de oscuridad empiezan a oírse noticias de Gran Bretaña,  una extraña plaga está afectando a la población matándolos y convirtiéndolos en zombis que sólo buscan morder. ¿Cómo podrán sobrevivir en  tan precarias condiciones cuando nada más empezar empieza a escasear la comida?

Sólos tiene un argumento muy interesante. Hemos leído en otros libros – e incluso lo hemos visto en el cine y en la televisión-  cómo la civilización caía poco a poco. La población huía, los muertos no se quedaban quietos, correr era una cuestión de vida o muerte y ser mordido significaba en el mejor de los casos que un amigo te volara la cabeza. Comprendemos ese desbarajuste en las grandes ciudades y pasamos un poco de largo cuando hablamos de lugares más pequeños. Y por eso Baker plantea una historia con una premisa muy buena ¿Qué pasaría si un grupo de personas, aparentemente a salvo de la enfermedad, se quedara encerrado en un lugar que tampoco ofrece muchas opciones de supervivencia?  No sólo debemos valorar el temor a los no muertos sino que a veces el peor peligro está en los que aún respiran. Y para que esta  premisa funcione debe de haber un retrato preciso y desgarrador de los personajes. Y aquí en donde tropieza un poco la novela.

Por muy buenas intenciones que tenga el autor no ha sabido darle a los personajes la caracterización que necesitaban. Vamos a explicarnos. La reverenda Jane nos sirve de ejemplo. Es una mujer obesa, un hecho que el autor no duda en repetir durante toda la novela, al principio porque lo era, después porque si bien ha perdido peso – hay que racionalizar la comida- ahora tiene las carnes fofas, y por último, al final, porque puede que ahora sea más o menos flaca pero en el fondo sigue siendo una «gorda» medido acomplejada. Debido a estas características me resulta increíble que se nos presente como una heroína de acción tipo Lara Croft.  Es que no pega con el personaje. Y con esto no quiero decir que las personas con unos cuantos kilos de más- o con muchos kilos de más- no puedan ser unos héroes pero el caso es que, si es cuestión de correr, al que primero pillan es al que lleva más peso encima sea suyo o por algo que carga. Tampoco tiene lógica que Jane siendo una reverenda sea la que peor hable de todos, la que más tacos diga y la que menos caridad cristiana tenga.  Además si tú estuvieras en una plataforma en la que trabajas desde hace tiempo ¿dejarías que una reverenda con un problema de peso y de personalidad se convierte en una especie de líder? Personalmente creo que la historia ganaría mucho más si se «eliminases» esas peculiaridades de la protagonista que solo la hacen más irreal. Vale, no queremos crear un personaje típico y por eso nos vamos hacia los extremos pero no podemos perder de vista las necesidades de la historia y aquí se olvidan en alguna que otra ocasión.

Con respecto a los demás personajes también tienen cierto toque de superficialidad. Supongo que  es porque este es el primer libro del autor y aún no sabe cómo manejar a los personajes,  aunque también puede ser porque en mi caso me gustaría que hubiese más terror psicológico en la historia porque su trama se presta a ello. Hay dos momentos concretos de tensión psicológica, de plantearse qué está bien y qué está mal que no están aprovechados en su totalidad.

Por otro lado en cuanto a detalles técnico es fantástica, tanto que después de leerla podríamos ir a una planta de extracción de petróleo en el Polo Norte y no nos perderíamos.  Está muy bien retratado esa sensación de frío que te congela los huesos si asomas el cuerpo sin la protección adecuada. Que estamos a muchos grados bajo cero. Y por encima siempre a oscuras.

Y sobre este punto otro elemento no aprovechado: el tiempo. Baker no ha sabido jugar con el paso del tiempo, con la sensación de que el final está cerca y no hay manera de huir de él. Hubiera sido muy fácil hacerlo, sólo habría que decir cuándo pasan las cosas; es tan fácil como poner la fecha antes de cada capítulo. No tengo ni idea de si la acción tiene lugar durante un mes, dos, tres o más.  Sé que hay unas Navidades pero poco más.

En lo que sí sobresale es en la propia historia. Me ha gustado el planteamiento que hace de los muertos vivientes, hay más complejidad en ellos de lo que aparenta. Algunos se transforman pronto,  otros son conscientes de que ya no están vivos al menos durante un cierto tiempo y  luego caen dentro de la mentalidad colectiva que impulsa a sus compañeros a morder a todo ser vivo que se les ponga por delante. Como curiosidad tienen unas cosas «metálicas» que dan que pensar. En mi caso me llamó la atención lo del astronauta y lo del mando. Todo parece simple. Pero no lo es.

Puede parecer que la novela no me ha gustado pero todo lo contrarío. Es cierto que me costó entrar dentro de la historia porque no entendía cómo era posible que Jane se convirtiera en heroína matazombis. Pero una vez que asumí el papel que la reverenda tiene pues comencé a disfrutar con su lectura. Como ya he dicho antes,  lo mejor es la trama y todos los interrogantes que el autor ha planteado y que me deja con ganas de leer la segunda parte y más con ese final sorprendente bueno.  Los demás fallos -pequeños a fin de cuenta – no entorpecen para nada su lectura. Es más puede que si lees Solos no entiendas cómo puedo ser tan quisquillosa con los personajes.

Como curiosidad el autor, Adam Baker me agradeció personalmente en un comentario de Goodreads que leyera su libro.  ¿No es un detalle estupendo?

Clasificación:7/10

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6 respuestas a “Solos, Adam Baker”

  1. Jejeje, parece divertida, tomo nota…graciassss

  2. Yo tampoco me llevo con los zombies…
    Besos,

  3. Pues esta vez no me convence. Que los zombies y yo no hacemos buenas migas…
    Besotes!!!

  4. Lo tengo esperando en la estantería, espero que me guste ya que no suelo leer mucho de esta temática, aunque tendré en cuenta todo lo que has señalado en la reseña
    besos

  5. Estupenda reseña, y la verdad es que me gusta de vez en cuando leer novelas de zombies, pero tengo pendientes un par de ellas para este verano, Diario de un zombi y la tercera parte de Los caminantes, así que de momento no creo que le haga hueco, aunque lo apunto para el futuro. Un beso

    1. Carmen, y Margai yo tampoco era de zombis pero si te encuentras con una buena novela puedes llevarte toda una sorpresa.

      Tatty espero leer pronto tu reseña para ver qué piensas del libro.

      Pilar, no he leído Diario de un zombi, y la saga de Carlos Sisi me la recomendaron mucho pero no me atrevo con ella. Esperaré tus críticas para ver si me animo.

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